Según la última encuesta del Consejo General de Dentistas en septiembre del 2020, el 15% de los españoles sufre odontofobia, una alteración “que suele estar provocada por experiencias previas en la clínica dental que no han sido satisfactorias, aunque también puede ser un miedo irracional que no corresponde a ningún motivo”.
El miedo a acudir al dentista se denomina odontofobia.
Aunque la mayor parte de los pacientes acaban anteponiendo los beneficios que tiene para la salud bucodental una visita al dentista, hay algunos que experimentan verdaderas crisis de ansiedad únicamente al pensar que tienen que acudir para un tratamiento o incluso para una simple revisión.
Este miedo puede tener sus raíces en un mal recuerdo de la infancia o por comentarios mal avenidos de amigos y familiares, o debido a una mala experiencia previa con un dentista. Lo importante es que la mayoría de los pacientes pueden superar este miedo irracional.
Desde Clínica Sainz de Baranda te proporcionamos una serie de consejos para superar los miedos que puedas tener a tu dentista.
- Acepta tu miedo.
El primer paso para poner fin a un miedo es aceptarlo. Si lo aceptamos podremos poner en práctica todos recursos existentes para superar la fobia.
- Chequeo sencillo.
Acude simplemente a una revisión, donde únicamente se va a comprobar el estado general de tus dientes y encías.
El objetivo de esta primera visita es comprobar si te sientes cómodo en esa clínica y si su personal te inspira confianza.
- Acude a primera hora de la mañana.
Además de ser el momento en el que menos gente habrá, y eso ayuda a no ponerse tan nervioso, ya “te lo quitas de encima” para el resto del día. Así no estarás durante todo el día pensando en la fatídica visita el dentista.
- Habla con tu dentista.
Es muy importante que hables con tu dentista y le cuentes cuál es tu problema, que le expreses tu fobia.
- Acude acompañado.
Cuando estamos acompañados por alguna persona de confianza nuestra confianza también aumenta, disminuyendo así los miedos.
- Aprende técnicas de relajación.
Respira profundamente y deja salir el aire lentamente. Esto ayudará a relajar los músculos y reducir la frecuencia cardíaca.
También puedes realizar ejercicios mentales de relajación, para que cuando sea tu turno te sientas con confianza suficiente.
- En la sala de espera usa distracciones.
Los momentos previos a la entrada al gabinete pueden ser los más estresantes.
Es recomendable hacer algo que desvíe tu atención. Una de las mejores formas de distraerse es escuchando música.
Lo importante en la sala de espera es mantener la cabeza ocupada con las cosas que más nos gustan.
- Consulta la posibilidad de tomar medicación para relajarte
No tomes ningún medicamento sin consultar previamente a tu médico o dentista.
- Cuida tus dientes.
El mejor modo de superar la fobia al dentista es asegurarte de que tus dientes estén bien cuidados.
Para una correcta salud bucal cepíllate los dientes después de cada comida, usar hilo dental y visita al dentista cada 6 meses para un examen y limpieza dental regular.