MANCHAS EN LOS DIENTES

Para tener una bonita sonrisa con dientes sanos y blancos es necesario algo más que el cepillado regular, usar hilo dental y las visitas al dentista. Es muy importante vigilar lo que comemos y bebemos.

Los alimentos que tienen un color intenso son los más propensos a colorear nuestros dientes, y se caracterizan por tener una sustancia llamada cromógeno, productora de pigmentos que tiene la capacidad de adherirse al esmalte dental y manchar así los dientes

Entre los alimentos que más molestias producen en la coloración de nuestra dentadura podemos encontrar:

  • Café: es muy recomendable lavar los dientes a continuación para proteger el esmalte natural de la dentadura.
  • El té es el gran enemigo de los dientes, mancha los dientes más que el café debido a que tiene una mayor concentración de tanino. El tanino es un tinte vegetal de origen natural que se encuentra en todo tipo de alimentos. No solo bebidas: la zanahoria, la remolacha, la col roja…
  • El vino tinto tiene tres componentes nocivos para el esmalte de nuestros dientes: ácido, cromógenos y taninos. El ácido tánico puede corroer el esmalte del diente, permitiendo que el color se filtre en los dientes. Estas sustancias trabajando juntas pueden convertir tus dientes blancos en un tono rojo o púrpura oscuro en poco tiempo. Es aconsejable enjuagar la boca con agua después de beberlo o cepillarte los dientes con pasta blanqueadora.
  • Tabaco y las salsas oscuras también colorean mucho los dientes.

A pesar de todas estas molestias, estas manchas son las más sencillas de eliminar y para ellas el tratamiento por excelencia es el blanqueamiento dental.
 
El blanqueamiento a láser es el más empleado en las clínicas dentales. Consiste en usar peróxido de hidrógeno con una intensidad de luz laser para acelerar el proceso de decoloración consiguiendo la eliminación de las manchas y blanqueando de nuevo los cristales de esmalte blanco en aproximadamente en una hora.

Con esta técnica se puede conseguir bajar hasta cuatro y seis tonos. Tiene una durabilidad aproximada de 1 año y medio y dependerá de los cuidados que se tengan.

A continuación os vamos a dar una serie de recomendación para mantener la dentadura lo más blanca posible.

  • Lavarse los dientes por lo menos dos veces al día, especialmente después de las comidas. Esto nos ayuda a mantener una buena higiene oral.
  • Enjuagar la boca tras cada café, vino, cigarro…
  • Dejar de fumar, ya que el tabaco es uno de los factores que más ensucia los dientes y el malísimo para la salud.
  • Usar hilo dental para la limpieza profunda de nuestra dentadura.
  • No cepillar con fuerza los dientes, ya que así podemos provocar que se desprenda el esmalte.
  • Los dentífricos anti manchas son muy abrasivos, por lo que el uso de este producto debe restringirse a dos o tres veces por semana.
  • Beber con pajita, así disminuimos el contacto de las bebidas propensas a manchar los dientes con la dentadura.
  • Revisiones periódicas con tu dentista.