En el momento de escoger un tipo de ortodoncia, las cuestiones estéticas suelen ser decisivas. Querer lucir una mejor sonrisa con un tratamiento discreto es el principal motivo por el que se recurre a los modelos invisibles. Uno de los tipos más comunes es la ortodoncia lingual.
Su característica más distintiva es que los brackets están sujetos a la dentición por su parte interna. Esto permite una mejora estética para el paciente, ya que el aparato de ortodoncia se encuentra menos visible.
Por otro lado, en este tratamiento los brackets son más pequeños, debido a que la cara interna de los dientes es más reducida que la externa, por lo que resulta más cómodo para el paciente.
Además de las anteriores ventajas, existen otros beneficios que aporta la ortodoncia lingual:
- Evita que se produzcan manchas en los dientes: en ocasiones, al retirar los brackets, se suele observar manchas en la dentición del paciente. Sobre todo, si no se ha llevado una correcta higiene bucal. Esta molestia se evita con la ortodoncia lingual.
- Tratamiento más corto: este modelo suele reducir el periodo del tratamiento en comparación con otro tipo de ortodoncia.
- Mayor higiene bucodental: puedes limpiar tus dientes prácticamente de la misma forma que antes de llevarla.
- Alta discreción: el aparato resulta prácticamente imperceptible, por lo que nadie se dará cuenta de que lo llevas.
Es muy importante cumplir con todas las revisiones indicadas por tu dentista. En estas citas, tu ortodoncista comprobará que el tratamiento está funcionando correctamente y realizará los ajustes necesarios.
Si estás pensando en someterte a un tratamiento de ortodoncia lingual, ponte en contacto con nosotros. Nuestro equipo de profesionales de la ortodoncia te asesorará para encontrar la mejor opción para ti.